Soy Virgen

Cuando era pequeñita recuerdo haber pensado en que era normal, común y natural llegar virgen al matrimonio. Antes que eso todavía, cuando me supe la verdad de la milanesa sobre como llegan los bebes al mundo, entendí que se "hacía el amor" para procrear nada más. Me acuerdo de las primeras veces en las que se me ocurrió preguntarme si mis papás seguían teniendo sexo a pesar de no querer tener más hijos. La inquietud me empezó a perturbar y he llegado a levantarme a untadillas a ver si mis papis "lo estaban haciendo". Hasta que se lo conté a mi diario íntimo, y una tarde mientras tomaba la leche luego del cole mamá me sentó y contó que con papa mantenían relaciones sexuales por placer… Puajjj...!! Creo que después de esa conversación tuve pesadillas y definí que mi madre no iba a ser mi amiga, no quería que tengamos estas conversaciones. (y obviamente cambié el escondite de mi diario).
Mi primera vez fue muy linda y con una persona muy importante para mi, pero ya paso hace rato. Podemos decir que fue no a una muy temprana edad, es más, a mi entender ya estaba medio grandecita y eso me hacía sentir muy insegura. Pero como les decía, esto fue hace mucho tiempo…
Esta semana me crucé con tres historias de virginidad que me dejaron pensando un poco…
Caso 1: Belen. 32 años. Soltera. Psicóloga. Quiere llegar virgen al matrimonio.
El tema es que Belén no tiene una actitud mojigatona frente a los hombres. Los busca, los seduce, los engatuza, la invitan a salir, va con su insinuador escote y arruga después del beso. “Son todos igualess! Me quiso garchar de una! Yo así no!” Entonces tiene un resentimiento terrible frente a estos, pero sigue esperando al hombre que la lleve al altar y a la cama la misma noche. Claro, que la victima de turno, lo que menos imagina es que Belén busca a ese tipo de hombre, porque la actitud con la que los encara es totalmente distinta.
Caso 2: Lourdes: 27 años. Soltera. A punto de recibirse. Es virgen y quiere dejar de serlo.
Este es el caso de la niña de familia católica, como lo indica su nombre, que soñaba con llegar virgen al matrimonio, pero llegada cierta edad las hormonas le ganaron y se arrepintió. Y ahora se le complicó. Lourdes es hermosa, simpática, amiguera, inteligente pero hiperinsegura. A tal punto que su virginidad hoy en día lo único que le genera es más inseguridad. Conoce a alguien que le gusta, él la invita a salir y la pavota se caga en las patas porque “como le voy a decir que soy virgen, me va a mandar a cagar”. Y con este prejuicio a cuestas, sigue por la vida buscandole fin a esta condición, pero claro, se sensura y yo la entiendo, no sebe ser nada fácil!!
Caso 3: Martín. 28 años. Soltero. Vive solo. Quiere llegar virgen al matrimonio.
Acá tenemos el más insólito de todos, es fachero, tiene plata, vive solo y quiere llegar 0km al altar y con una mujer que también sea virgen!!! Martín esta muy en paz con esto. Trabaja en gastronomía y las camareras, niñas sexys en minifanda de entre 17 y 25 años, viven coqueteándole y tratando de calentarlo, pero el dice que esta muy seguro de lo que quiere. Es evidente que tiene que cambiar de rubro, porque en la noche gastronómica no existen las chicas “puras”.
De los tres, Martín es el único que convive en paz con su condición y esta orgulloso de ello.
Los vírgenes viven en una constante situación de marginación, porque el sexo esta en todos lados. En la tele, en la calle, en la radio, en todas las conversaciones existentes, en los chistes, en el trabajo, en las remeras, en la publicidad, en el doble sentido todo el tiempo.
Y como no sentirse distintos en estos casos?
Cuantas de las conversaciones que mantienen con sus amigos/as NO tienen que ver con sexo??
Cuantas horas por día pasas sin hacer o escuchar un chiste de doble sentido?
Los vírgenes, como ellos declaran, quedan excluidos de las charlas… porque no tiene experiencia para decir cual fue la mas grande que vieron? El lugar mas raro donde lo hicieron? La mina mas rápida que conocieron? La cantidad de polvos en una noche? O que pose prefieren?…
Entonces sí o sí empiezan a sentirse marginados…

Por eso no soy virgen.