Pero hay un ingrediente secreto que no se consigue en la estantería de un supermercado chino: la magia.
La magia es eso que no podemos explicar, son esas cosquillitas en la panza que no sabemos cómo aparecen y menos así como desaparecen.
El tiempo pasa, entran en juego otras cosas y la magia… donde queda? Como mantener esa magia a lo largo del tiempo? Como crearla? Como sostenerla?
Creo que a lo largo de que el tiempo transcurre nos olvidamos de esa magia. Y de golpe y porrazo nos preguntamos… que me pasa? Que es diferente a hace un tiempo atrás?
Creo que lo más loco es que esperamos que esa magia sea siempre la misma y no nos hacemos responsables que somos seres que mutamos y nos transformamos todo el tiempo y así nuestras relaciones. Entonces tal vez en vez de pensar que perdimos la magia que teníamos estaría bueno preguntarme que es magia hoy y que es magia mañana. O acaso no sería poco sano que esas cosquillas en la panza se queden para siempre? No se transformaría en un dolor de barriga insoportable?